“Recemos para que todos puedan recibir su mensaje y crecer en la responsabilidad hacia la casa común que Dios nos ha confiado”: Papa Francisco, Ángelus del 14 de Junio, de 2015, hablando sobre la próxima encíclica Laudato Si´, dedicada a la ecología.
Aunque el tema no ha sido uno de los mensajes más explícitos y constantes de la Iglesia, el cuidado de la ecología y su aprecio siempre ha estado presente en la conciencia de los cristianos. Ya San Pablo, en un pasaje de su Carta a los Romanos dice: “La Creación… espera ser liberada de la corrupción para participar en la gloriosa libertad de los Hijos de Dios” (Rom, 8, 20-22). Y San Francisco de Asís, en su Cántico de las Creaturas nos recuerda de las hermanas estrellas y los hermanos gusanos.
El 18 de Junio el Papa Francisco promulgó una encíclica, titulada Laudato Si´, “Alabado seas”. Se trata de una frase del Canto de las Criaturas de San Francisco de Asís, en donde alaba a Dios por los dones de la Creación. Una encíclica sobre ecología y el respeto de la creación. Sobre ecología natural y también humana. Revela la postura del Papa en cuestiones delicadas como el cambio climático. Y pedirá a los gobiernos una implicación mayor.
En nuestro tiempo, el impacto de las actividades humanas sobre nuestra casa común, la Tierra, ha sido mucho más extenso que en ninguna otra época de la humanidad. Lo que en otro tiempo pudo haber sido una preocupación menos importante, ahora se ha vuelto una cuestión urgente. No sólo por los daños que estamos dejando a las generaciones venideras, sino también por el daño que actualmente ya se hace en muchos países, en particular a los menos desarrollados.
Un tipo de contaminación que está poco presente en la conciencia pública, es la que está causando los desechos de diversos tipos de equipo electrónico. Aunque ya existe un reciclaje parcial, éste se lleva a cabo de manera poco profesional, aprovechando los componentes de más fácil acceso, como pudieran ser el cobre y algunos otros metales, pero por el modo poco técnico de hacerlo se dispersan otros contaminantes que afectan al ambiente y, en muchos casos, a los propios recicladores que suele ser gente de escasos recursos. Se estima que para el año 2017, a nivel mundial la cantidad de equipos desechados y que deberían ser reciclados de una manera adecuada alcanzará 65.4 millones de toneladas anuales y que pudieran permitir recuperar un valor significativo de estos, reduciendo proporcionalmente el impacto en el ambiente.
Por estas consideraciones, en México, la Red de Comunicadores Católicos promueve el Programa Permanente de Reciclaje Electrónico “Iglesia Recicla”, con el propósito de facilitar que la población de nuestro país contribuya a la solución de este problema y a la vez ayudar en necesidades materiales de la Iglesia.
La mecánica es la siguiente: a través de centros de acopio, que se establecerán en las parroquias y en otros lugares públicos, se recibirían toda clase de desechos de aparatos electrónicos que están fuera de uso. Estos residuos serán procesados por una empresa certificada para hacer ese reciclamiento con los mejores estándares actualmente disponibles, para reducir al mínimo el impacto ambiental y generar recursos. En el programa “Iglesia Recicla”, la generación de recursos será destinada a las obras de apostolado que operan los centros de acopio.
Los equipos a reciclar son equipos electrónicos de cómputo, comunicación, y entretenimiento, así como los equipos auxiliares que facilitan el funcionamiento de los mismos. El programa inició los primeros días de junio de 2015. La primera etapa consiste en establecer centros de acopio en diversos puntos de la Ciudad de México. El primero se localiza en el Convento de La Visitación de María, en la colonia Mixcoac. En etapas posteriores se establecerán centros de acopio en todo el país, preferentemente en las parroquias.
Se invita a la comunidad, y a los movimientos eclesiales, a participar: llevando sus aparatos electrónicos a los centros de acopio, inscribiendo a su parroquia o movimiento al programa y ayudando a la difusión del mismo.
Mayor información www.iglesiarecicla.org
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