En su tercer día de visita pastoral a Ecuador el Papa Francisco se reunió con los obispos de esta nación en el centro de convenciones del Parque Bicentenario, en donde también celebró una Santa Misa en presencia de más de millón y medio de fieles. Una celebración centrada en la evangelización de los pueblos como una gran familia, sin exclusiones, así lo explicó durante su homilía.
A continuación se dirigió a la Pontificia Universidad Católica de Ecuador, en donde felicitó a los presentes, maestros y alumnos, por continuar desde casi 70 años la misión educadora de la Iglesia que, como Jesús, busca llegar al corazón del hombre.
Posteriormente, sostuvo un encuentro con la sociedad civil en la Iglesia de San Francisco, en donde el alcalde Mauricio Rodas le hizo entrega de las llaves de la ciudad; y tras ser recibido por una multitud de fieles y cánticos, y después de haber dejado un ramo de rosas a los pies del Cristo del Gran Poder, el Arzobispo Luis Cabrera Herrera le dio la bienvenida. Así también el Papa expresó sentirse como en casa, porque la familia nos enseña a no excluir a nadie y a ver por el bien común. Pidió ser más agradecidos con los padres y con la naturaleza, y acercarse más a los necesitados.
Para el miércoles 8 de julio, como parte de su tercer y último día de visita pastoral en Ecuador, el Obispo de Roma visitó el hogar para ancianos de las Misioneras de la Caridad. Fue recibido por las religiosas con mucho afecto, quienes le dieron un breve recorrido en las instalaciones del lugar y en donde convivió con los ancianos.
Antes de partir a Bolivia, se dirigió al Santuario de Nuestra Señora de Quinche, Virgen Patrona de Ecuador, invitando al clero, religiosos, religiosas y seminaristas a aceptar la misión que el Señor nos da, sin poner condiciones. Además, agradeció ante los pies de la Virgen de Quinche lo que vivió en estos días en Ecuador.
Al término, se dirigió al aeropuerto para continuar con su viaje pastoral, en donde fue despedido con gran cariño al son de la Orquesta Sinfónica Infanto Juvenil y con la participación de niños con capacidad especial auditiva.
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