Los días del 1 al 3 de septiembre del presente año, los Obispos de la provincia de Acapulco se reunieron con los responsables de Comisiones y Dimensiones Diocesanas, para dar seguimiento a iniciativas y promover formas más eficaces de acompañamiento pastoral.
Estuvieron presentes los Obispos de Acapulco, Chilpancingo-Chilapa, Tlapa y Ciudad Altamirano; Mons. Carlos Garfias, Mons. Alejo Zavala, Mons. Dagoberto Sosa y Mons. Maximino Martínez, respectivamente, en la Parroquia de Santiago Apóstol, en Zumpango del Río.
En un comunicado manifiestan su beneplácito por la instauración de la Jornada de Oración por el Cuidado de la Creación, y agregan que diferentes situaciones en el estado de Guerrero deben ser resueltas según los “criterios éticos” que se ofrecen en la Encíclica, tales como la explotación minera, la ingente deforestación de los bosques o el manejo de los desechos. No omiten mencionar que en la provincia celebran cada 4 de octubre, fiesta de San Francisco de Asís, la Jornada Provincial del Medio Ambiente.
Por otro lado se reflexionó ampliamente, en dicha reunión, la situación de la familia y de los jóvenes. “Advertimos que hay una diversidad de tipo de familias, con fortalezas y debilidades, necesitadas de ser atendidas por quienes tenemos una responsabilidad social y eclesial”. Además, se subraya que la violencia ha afectado a muchas de ellas.
Buscan además ofrecer una atención muy competente a las familias, con énfasis en la construcción de éstas, brindando el mejor apoyo a los novios que pretenden contraer matrimonio y fundar una familia. “Creemos que familias sanas contribuyen decididamente a la salud social”.
En cuanto a los jóvenes, se busca ofrecer a éstos opciones en ese tiempo de grandes decisiones, que sientan “el cariño de la Iglesia y la preocupación por acompañarles, sobre todo cuando se encuentren en situaciones de dificultad o sean victimas de la violencia”. Plantearon la creación de Centros Juveniles con enfoque de Paz, que les ayude a continuar sus estudios, encontrar opciones laborales, así como esparcirse en lugares seguros y lograr una evangelización de joven a joven.
Señalan que los gobiernos y los legisladores requieren apoyar a las familias y a los jóvenes con acciones de prevención, y convocaron a instituciones educativas y de la sociedad civil, así como a otros actores, a “sumarse en este esfuerzo que nos favorecerá a todos”.
Oraron a Santa María de Guadalupe y a los santos oriundos de Guerrero, San Margarito Flores y San David Uribe, para que les concedan “construir familias fuertes en la solidaridad y acompañar a los jóvenes para que sean protagonistas en la sociedad”.
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