En la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium el Papa Francisco subraya la importancia de salir a anunciar el Evangelio para ser una Iglesia con las puertas abiertas y que con urgencia transforme la cultura actual que privilegia la apariencia, lo superficial, el consumo, el individualismo y el descarte incluso del ser humano. El llamado es salir al encuentro del otro, afirmó el secretario del Consejo Pontificio para la Cultura de la Santa Sede, Melchor Sánchez de Toca.
En diálogo con representantes de diferentes sectores de la sociedad (intelectuales, empresarios, académicos) en el que participó también el Nuncio Apostólico en México, Christophe Pierre, el enviado del Papa Francisco encabezó la presentación de la Exhortación Apostólica, Evangelii gaudium, a través de la cual se hace un llamado a todos los católicos del mundo a revalorar la preponderancia del ser humano por encima de todo.
Ante el público que se dio cita en el Centro Libanés, al que asistió también el empresario Patricio Slim, Sánchez de Toca explicó que en este documento el Papa Francisco no se concentra sólo en un aspecto doctrinal; por el contrario, “es como un compendio de su pensamiento”, en el que aborda doctrina social, economía, aspectos sociales e incluso hace énfasis sobre la importancia de la homilía. Empero, agregó, “no tiene el monopolio de la interpretación de la realidad social”.
Sánchez de Toca subrayó cinco aspectos “clave” de la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium, una de ellas, quizá la más importante: “pasar de la cultura del desecho o del descarte a la cultura del encuentro”.
Hoy desechamos todo, preferimos tirar que arreglar; el problema es que eso mismo estamos haciendo con las personas. La realidad nos dice que hoy desechamos, excluimos a grandes poblaciones, las hacemos a un lado del desarrollo, del progreso, no las vemos, las hacemos a un lado; y eso es lo que el Papa Francisco llama a cambiar.
En la exhortación, agregó, el Papa denuncia “que se consume ansiosamente y se calma esa ansiedad a golpe de tarjeta de crédito”. Ese consumo, abundó, no sólo incluye las cosas, sino afecta también a las personas.
Priva en el mundo una “economía de la exclusión” y de la inequidad, donde grandes masas de población se ven excluidas. “Se considera al ser humano como un bien de consumo que se puede usar o tirar”. La crisis que vivimos no es financiera, sino antropológica. Por ello, el documento nos invita a correr el riesgo del encuentro, de buscar el rostro del otro, dijo.
La siguiente clave es la importancia del Pueblo de Dios. La santidad en la Iglesia, dijo, “no es para las élites”, “para unos elegidos” o “un proyecto para una minoría ilustrada”, sino que se trata de un proyecto que incluye a todos, con impacto social y cultural.
Sánchez de Toca refiere que el Papa invita a los pastores a redescubrir la alegría de pertenecer a un pueblo, “ser pastores que huelan a oveja”. El llamado es a acabar con los obispos de aeropuerto o los párrocos de escritorio. Hay que salir, salir a evangelizar, y no esperar, o a contemplar desde la comodidad o el lujo, la tarea evangelizadora.
La otra “clave”, abundó Sánchez de Toca, es la acción por los pobres y la praxis de la caridad. El Papa Francisco “no nos invita a la caridad o a la filantropía; él quiere que se salga al encuentro de los pobres. Es tocar la carne de Cristo en los pobres”.
Desde el momento en que nos preocupe más que la Bolsa de Valores baje uno o dos puntos, y no nos importe que un anciano muera en las calles de cualquier país, en ese momento podemos decir que estamos mal.
Otro aspecto clave del documento, es la preocupación por el inmanentismo práctico, la clausura del cierre a todo lo que esté más allá de uno mismo, la irrelevancia del próximo, y que incluso encierra a las comunidades en sí mismas, en un “inmanentismo antropocéntrico”.
Y por último, también aborda las cuestiones morales, donde no hace “rebajas a la doctrina”, y cita como ejemplo el caso del aborto el cual no está sujeto a reformas. “No es progresista resolverlo eliminando una vida humana, pero quizá hemos hecho poco por acompañar a la mujer que se encuentra en esta situación de un embarazo inesperado”.
Finalmente, el secretario del Consejo Pontificio para la Cultura de la Santa Sede concluyó que la Exhortación Apostólica, Evangelii gaudium también brinda criterios de acción, como: activar procesos de conversión, tener valor de enfrentar proyectos y en todo plan tomar en cuenta la realidad.
El foro de análisis de la Exhortación Apostólica Evangelii gaudium se realizó la noche del jueves 1 de mayo, en el Centro Libanés de la Ciudad de México.
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