“El reto de los comunicadores ha sido siempre el anunciar el Evangelio en el mundo de hoy”, sostuvo el Nuncio Apostólico en México, Monseñor Christophe Pierre, en la 48 Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales (JMCS) 2014, realizada en la Universidad La Salle de la Ciudad de México.
Con motivo de esta jornada celebrada a nivel mundial el 1 de junio, se dieron cita para celebrar dicho encuentro estudiantes de diversas universidades, destacados comunicadores y diversos clérigos de la Iglesia Católica, para reiterar el mensaje del Papa Francisco en recientes días, en el que exhorta a laicos y comunicadores católicos a promover la cultura del encuentro mediante el uso de las nuevas tecnologías, para tener presencia, diálogo y proximidad con todas aquellas personas que necesitan escuchar el Evangelio, es decir, a Jesucristo mismo.
En su discurso de apertura, Monseñor Oscar Roberto Domínguez, Obispo de Ecatepec, señaló que estamos ante los retos de una nueva comunicación que exige dar con veracidad los hechos que se suscitan, pero no de forma fría y cruel, sino llevar el mensaje de amor y fraternidad, ya que en estos tiempos los únicos mensajes que permean en la sociedad son negativos, que no ayudan a la prosperidad social.
Por su parte, Monseñor Pierre refirió que una Iglesia que no comunica es una Iglesia que no funciona; para lograr una efectiva comunicación, debe ser una Iglesia abierta, que comunica con el hombre teniendo la actitud del “Buen samaritano”, parábola que enseña que la fe debe manifestarse a través de las obras.
En el evento se proyectó un videomensaje de Claudio Maria Celli, presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales, que enfatiza la importancia de los medios de comunicación al servicio de la Iglesia católica.
En entrevista con yoinfluyo.com, Monseñor Pierre indicó que el reto de los comunicadores es el de transmitir el Evangelio, misión primordial de la Iglesia, porque con ello estamos realizando el llamado que Cristo nos hace a todos nosotros: el anunciar lo que significa ser discípulos de Jesús.
“Durante estos días de Pascua y Pentecostés, estamos leyendo un libro magnifico que es Los Hechos de los Apóstoles, porque cuentan principalmente la historia de San Pablo, un hombre que un día se encuentra con Cristo y esto cambia su vida, para tener una visión distinta del mundo y casi comprender la historia de la humanidad”.
“Cristo fue la inspiración de su vida, y a partir de esto es como un comunicador debe llegar a sentir en su vida para anunciar la Buena Nueva a todos los confines del mundo”, manifestó el Nuncio.
Al evento asistió también el senador Javier Corral Jurado, del grupo parlamentario del PAN, quien en su ponencia abordó el tema de las leyes secundarias de la Reforma de las Telecomunicaciones, apuntando que dicha ley es una de las mayores reformas del sistema de medios de comunicación, la cual incorpora principios muy importantes en términos de derechos de las audiencias y de medidas a favor de la competencia, no solamente para que haya mayores jugadores dentro del modelo comercial de la radio y la televisión, sino fundamentalmente para ampliar la pluralidad y diversidad de los medios de comunicación.
Lo malo es que la legislación secundaria pretende dar marcha atrás varias cosas que ya se habían discutido, por ejemplo, las medidas de competencia efectiva para dejar intocado al duopolio de la televisión y el oligopolio de la radio.
En entrevista con yoinfluyo.com, el senador Corral indicó que las organizaciones sociales y asociaciones religiosas deberían estar interesadas en la legislación secundaria de la Reforma de Telecomunicaciones, ya que toca el ejercicio de uno de los derechos humanos fundamentales, como es el de la comunicación y el derecho a la información.
Al término del evento, a nombre de Monseñor Luis Artemio Flores Calzada, presidente de la Comisión Episcopal para la Pastoral de la Comunicación, el padre Antonio Camacho, secretario ejecutivo de dicha Comisión Episcopal y organizador del encuentro, exhortó a darle un sentido a la comunicación, con ternura, con entusiasmo, con compasión, pero con mucho coraje, porque se cuenta con la palabra de Cristo y se debe comunicar, como dice San Pablo, “a tiempo y a destiempo”.
“Nosotros tenemos un gran compromiso en la Iglesia, porque somos los evangelizadores digitales de hoy, no del mañana. Cada uno de nosotros tenemos la capacidad y la responsabilidad de cambiar nuestro teléfono inteligente en personas inteligentes, nuestras computadoras digitales en hombres que sepan amar, nuestro radio y televisión en nuevas audiencias que puedan escuchar la palabra de Dios… Cada uno de nosotros tiene la capacidad y la inteligencia que nos ha dado Dios para cambiar este mundo y transformarlo en una nueva civilización, como diría San Juan Pablo II, en una civilización del amor”.
Por su parte, Monseñor Pierre cerró el encuentro indicando que el reto de los católicos es tomar una decisión de ser verdaderamente personas, personas con convicción y personas de fe.
“Necesitamos salir de nosotros mismos, primero, para poder salir al encuentro con los demás y lograr así a que exista comunidad entre los creyentes y compartir nuestra fe… Salir al encuentro del mundo y decir: ¡Jesús ha resucitado!”
“No sean comunicadores cualesquiera, sean comunicadores católicos, comunicadores de la presencia de Cristo en su vida; que las consecuencias de la presencia de Cristo generen valores humanos, porque eso es lo bello de nuestra fe, que nos ayuda a ser más humanos”, manifestó el Nuncio Apostólico.
Al evento asistieron Ángel Dorantes, Jorge Ortega, Ricardo Cruz, Rogelio Vega, el hermano José Manuel Velazco Arzac, el padre Ángel Luis Lorente Gutiérrez y José Manuel Noriega.
Participaron en la organización del evento el Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales (PCCS), la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), la Comisión Episcopal para la Pastoral de la Comunicación (CEPCOM), la Asociación Católica Mundial para la Comunicación en México (SIGNIS) y la Red de Comunicadores Católicos.
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