La familia es transmisora de la fe y los buenos afectos
Fundada en el hombre y la mujer, la familia es la pequeña iglesia que inicia en la fe. En la familia aprendemos la sabiduría de los afectos.
Fundada en el hombre y la mujer, la familia es la pequeña iglesia que inicia en la fe. En la familia aprendemos la sabiduría de los afectos.
Al valorar las tres dimensiones de la vida familiar, todo cobra sentido: familia, trabajo, alegría, sufrimiento y muerte.
Aunque contradicen el Sacramento del Matrimonio, cabe aclarar que las personas en nuevas uniones no están excomulgadas y deben ir a Misa.
El 18 de octubre se realizó la Santa Misa y Canonización de los Beatos Louis Martin y Marie Zélie Guérin, Vincenzo Grossi y Maria de la Purísima.
Durante el Ángelus el Papa habló sobre la tensión y violencia que afecta a Tierra Santa, pidiendo fortaleza de ánimo para actuar con paz y no con odio.
El Noviazgo es un camino para descubrir una llamada de Dios y un camino para alcanzar la madurez que conduzca a la pareja al Amor.
Cada niño que viene al mundo, además de recibir el afecto y cuidado de sus padres, nace también con una promesa de amor por parte de Dios, dice el Papa.
Al interior del Matrimonio, son igualmente importantes la igualdad de los cónyuges, su carácter indisoluble y el valor de la maternidad y paternidad.
Dos tareas esenciales por realizar en el ámbito de la familia, son: rescatar el “genio femenino” y rescatar la alianza hombre-mujer.
Dinero, placer y el éxito deslumbran, pero luego desilusionan; Jesús es el único que puede apagar nuestra sed de felicidad, dice el Papa en el Ángelus.