Primera escala del viaje apostólico a Sri Lanka y Filipinas.
El Santo Padre Francisco inició este lunes 12 de enero su viaje apostólico a Sri Lanka y Filipinas, abordando el avión en el aeropuerto Fiumicino rumbo a Colombo, capital de Sri Lanka, primera escala del itinerario.
A su llegada, ya el 13 de enero, se llevó a cabo la ceremonia de bienvenida, durante la cual expresó que: “Durante muchos años Sri Lanka ha conocido los horrores de la contienda civil, y ahora trata de consolidar la paz y curar las heridas de esos años. No es tarea fácil superar el enorme legado de injusticias, hostilidad y desconfianza que dejó el conflicto. Esto sólo se puede conseguir venciendo al mal con el bien y mediante el cultivo de las virtudes que favorecen la reconciliación, la solidaridad y la paz”.
Y añadió: “Siempre que las personas se escuchan unos a otros con humildad y franqueza, sus valores y aspiraciones comunes se hacen más evidentes. La diversidad ya no se ve como una amenaza, sino como una fuente de enriquecimiento”.
Posteriormente, el Papa Francisco se trasladó a la Nunciatura Apostólica y celebró la Santa Misa en privado, para más tarde acudir a un encuentro interreligioso y ecuménico en el cual compartió con las cuatro comunidades religiosas de mayor importancia en el país: budismo, hinduismo, islam y cristianismo.
En su discurso señaló: “Espero que la cooperación religiosa y ecuménica demuestre que los hombres y mujeres no tienen que renunciar a su identidad, ya sea étnica o religiosa, para vivir en armonía con sus hermanos y hermanas”.
Además, hizo un fuerte llamado contra la violencia: “Por el bien de la paz, nunca se deben permitir que las creencias religiosas sean utilizadas para justificar la violencia y la guerra. Tenemos que exigir a nuestras comunidades, con claridad y sin equívocos, que vivan plenamente los principios de paz y de convivencia que se encuentran en cada religión, y denunciar los actos de violencia que se cometan”.
El día de mañana tendrá lugar la canonización del Beato José Vaz, en la Eucaristía que se celebrará en el Galle Face Green de Colombo, evento de la mayor importancia durante la visita del Papa a Sri Lanka.
José Vaz fue un sacerdote nacido en 1671, ordenado en la Arquidiócesis de Goa en 1676, ayudó a la comunidad de Ceylán golpeada por la persecución holandesa. Trabajó incansablemente para reconstruir la Iglesia en Sri Lanka, falleció en 1711 y fue beatificado por San Juan Pablo II en 1995.
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