El Papa Francisco, durante el vuelo de regreso de Manila a Roma otorgó un tiempo en Conferencia de Prensa a los corresponsales de los medios internacionales para responder diferentes preguntas, con relación a su viaje apostólico recién concluido y futuros viajes, entre otras cuestiones.
Algunos de los temas tratados durante estos últimos días y que fueron recuperados en esta última conferencia de prensa fueron por ejemplo la libertad de expresión, la apertura a la vida, la corrupción, “las colonizaciones ideológicas”, lo aprendido del viaje, etc.
En cuanto a la libertad de expresión, precisó la respuesta que ya había dado con anterioridad, en el sentido de que, en general, se está de acuerdo con que “hay que poner la otra mejilla”, pero todos somos humanos, por eso siempre debe existir la prudencia, porque la ofensa repetida puede provocar una reacción mala.
El tema de la apertura a la vida y la paternidad responsable lo incluye en su discurso dado en el Encuentro con las familias en Manila, subrayando la figura y enseñanza del Beato Pablo VI. Abundó diciendo que cuando el número de hijos no es ni siquiera el mínimo, “creo que tres es el número que dicen los técnicos para mantener la población. Tres por pareja”. Pasa como en Italia que en algunos años no tendrá para pagar a los jubilados.
Pero, ¿cómo se logra la paternidad responsable? Con diálogo, las personas y el pastor. “Algunos creen que –disculpad la expresión– que para ser buenos católicos hay que ser como conejos. No, paternidad responsable. Esto está claro, para ello hay grupos matrimoniales en la Iglesia, hay expertos en esto, están los pastores y se busca. Yo conozco muchas formas lícitas de conseguirlo”. Pero no se puede olvidar que “para las personas más pobres los hijos son un tesoro”.
Con referencia a la corrupción, señaló que las victimas principales de la corrupción son los pobres. En cuanto combatir la corrupción en la Iglesia, el Papa incluye a todos los bautizados, porque ellos forman la Iglesia; reconoce que todos somos pecadores y agregó: “Es fácil caer en la corrupción, pero recordemos esto: ¡Pecadores sí, corruptos no!, ¡Corruptos nunca! Tenemos que pedir perdón por esos católicos que escandalizan con su corrupción. Es una plaga en la Iglesia, pero también hay muchos santos, y santos pecadores, pero no corruptos”.
Y compartió una anécdota en la que en una ocasión unos funcionarios de gobierno le ofrecieron 400,000 pesos, cuando la paridad con el dólar era uno a uno, para sus “villas miseria”, pero con la condición de que les devolviera la mitad, oferta que rechazó.
Para hablar de las colonizaciones ideológicas platicó otro hecho: un Ministro de Educación pidió un préstamo para construir escuelas, pero para obtener los recursos estaba obligado a usar un libro que involucraba la teoría de género. “Esta es la colonización ideológica: entran en un pueblo con una idea que nada tiene que ver con el pueblo; sí con grupos del pueblo, pero no con el pueblo, y colonizan al pueblo con una idea que cambia o quiere cambiar una mentalidad o una estructura”. Y señaló que esto no es nuevo, tal como ocurrió con las juventudes fascistas o hitlerianas.
Al responder sobre si había aprendido algo de los filipinos, mencionó: “Los gestos, los gestos”, que son salidos del corazón, sin protocolo; por ejemplo el de los papá que levantan en hombros a sus hijos para que los bendijera el Papa, como diciendo que ese era su tesoro. Habló también sobre su entusiasmo y su alegría. Comentó que la reunión que tuvo con el padre de la voluntaria fallecida le edificó, al decirle que había muerto en servicio.
En cuanto a sus próximos viajes, señaló que podría ir a África hacia finales de año y por supuesto a Estados Unidos para el Encuentro Mundial de las Familias y para la canonización de Junípero Sera en septiembre.
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