
El amor es libre; ama sin poseer, dice el Papa a jóvenes
Amar quiere decir dar, no sólo algo material, sino algo de uno mismo: el tiempo personal, la propia amistad, las capacidades personales, les explica.
Amar quiere decir dar, no sólo algo material, sino algo de uno mismo: el tiempo personal, la propia amistad, las capacidades personales, les explica.
Los límites existen. El hombre vivirá sólo si sabe respetarlos. Tal vez no vayamos a perecer por exceso de radiactividad, sino por exceso de libertad.
El Santo Padre habló de la experiencia sinodal, de su significado y el arduo trabajo animado por la oración y un espíritu de verdadera comunión.
El Papa Francisco en la Audiencia General, comenta que el amor, así como la amistad, generan un vínculo sin quitar libertad.
Cuando Jesús estableció la indisolubilidad, abrió las puertas de nuestra humanidad al misterio, para ir más allá de lo natural y de lo jurídico.
Hidalgo presentó a Santa María de Guadalupe como la protectora de una nación mestiza, y la convirtió en forjadora de un país independiente.
Guiados por los maestros y apoyados por la familia, compañeros y amigos, procuremos conocer mejor y más profundamente la realidad.
Poner freno a la lectura, lejos de suponer un menoscabo a la libertad y autodeterminación de las personas, las protege de la manipulación y el error.
Quien más disfruta cada momento es el que valora a cada persona y cosa, en vez de buscar lo que no se tiene. Hay que saber gozar de lo más simple.
Los católicos estamos llamados a ser un escándalo frente al marketing del hipersexualismo, por la libertad con que deseamos vivir nuestra sexualidad.
El Santo Padre habla a la juventud paraguaya sobre la verdadera libertad, el corazón libre, la importancia de la amistad, el esfuerzo y la solidaridad.
Me sorprende el misterio de la libertad, pero me sorprende más lo miserables que podemos llegar a ser en su uso, en su depravación, en su prostitución.